El pasado 30 de marzo, Roxana Fabris, presidenta de Construyendo y Creciendo, una fundación que se enfoca en crear oportunidades económicas para trabajadores de la construcción y otras poblaciones vulnerables en la República Mexicana, participó en una entrevista para la revista estadounidense PerceptivX.
![](https://amevec.mx/wp-content/uploads/2023/05/seramevec-2305-construyendoycreciendo-1-1024x1024.jpg)
En la entrevista, Roxana Fabris destacó el esfuerzo de los estudiantes de la fundación para lograr concluir algún nivel de estudios, cursos de capacitación y desarrollo humano, lo que les permite mejorar su calidad de vida y ser mejores trabajadores y mejores mexicanos.
“El éxito de nuestro modelo radica en la instalación de aulas de estudio dentro de las obras o en espacios públicos bien ubicados para que los trabajadores y demás miembros de la comunidad puedan acceder a una educación gratuita, de calidad y con un enfoque constructivista. El proceso educativo es personalizado, tomando en cuenta los intereses y el contexto de cada estudiante, a quienes buscamos convertir en hacedores de Cambio, que promuevan la importancia de la educación y la formación entre su círculo cercano, sus familias y comunidades”.
Asimismo, hizo señaló que la importancia del proyecto radica en que la industria de la construcción es el tercer mayor contribuyente al PIB de México, con cerca del 14%. También es uno de los sectores que más empleo genera en el país y, sin embargo, representa el segundo sector económico con mayor brecha educativa: el 10% de los albañiles aún son analfabetos, y solo el 47% de los trabajadores de la construcción han completado algún nivel de educación.
“Al ofrecerles educación y capacitación gratuita a través de salas de estudio dentro de las obras, los ayudamos a superar los principales obstáculos para continuar sus estudios: tiempo, dinero y distancia”.
De igual manera, destacó que el enfoque de la fundación tiene como eje principal el desarrollo de las mujeres en la construcción, quienes, a pesar de tener un mayor nivel educativo, ocupan los puestos más bajos y ganan mucho menos que los hombres.
“Me motiva poder impactar significativamente en los indicadores de desarrollo humano de esta industria y del país en general, lo que ya hicimos gracias al Premio UNESCO: convertirnos en un referente en el mundo sobre cómo ofrecer educación a poblaciones vulnerables”, señaló.
Consulta la entrevista completa en:
Colaboración: Construyendo y Creciendo