Queremos compartir contigo algunos errores frecuentes que cometen los profesionales al instalar ventanas en obra, los cuales pueden afectar tanto la durabilidad de las ventanas como la comodidad y seguridad del usuario.

- No realizar una correcta preparación de la superficie donde se instalará la ventana.
Esto incluye limpiar y nivelar adecuadamente el hueco, lo que puede provocar que la ventana quede mal alineada o con espacios vacíos que afecten su funcionamiento y eficiencia térmica.
- No verificar las dimensiones del hueco antes de la instalación.
Medir incorrectamente puede llevar a que la ventana no encaje perfectamente, generando problemas de cierre, filtraciones de aire o agua, y dificultades en el ajuste final.
- Inadecuada elección del tipo de ventana para cada clima.
Instalar ventanas que no son apropiadas para las condiciones ambientales puede reducir su durabilidad, aumentar el consumo energético y disminuir el confort en el interior del hogar.
- Sellado deficiente o inadecuado en los bordes y marcos.
No aplicar selladores o usar selladores de baja calidad puede provocar filtraciones de agua y aire, afectando la eficiencia energética y causando posibles daños por humedad en las paredes.
- La incorrecta nivelación y plomeo durante la instalación
Esta situación puede generar que la ventana quede inclinada o desajustada afectando no solo la estética, sino que también puede dificultar el cierre correcto y el funcionamiento de las hojas o ventanas correderas.
- No seguir las instrucciones del fabricante.
Cada ventana tiene especificaciones particulares en cuanto a montaje, fijación y sellado; ignorarlas puede comprometer la integridad y el rendimiento del producto.
- Uso de anclajes o tornillos inadecuados o de mala calidad.
Esto puede provocar que la ventana no quede firmemente sujeta, aumentando el riesgo de desplazamientos, roturas o fallas estructurales con el tiempo.
- La omisión de verificar la nivelación y el plomeo después de la instalación.
Esta situación puede llevar a que se detecten problemas solo en etapas posteriores, dificultando su corrección y generando costos adicionales. Es fundamental realizar revisiones en cada fase del proceso.
- Cuidado de las ventanas durante su almacenamiento y manipulación en obra.
La falta de protección de la ventana durante la obra, como no cubrirla o protegerla de golpes y suciedad, puede causar daños en el vidrio o en los marcos, afectando su apariencia y funcionalidad final.
- Mantenimiento preventivo
No realizar un correcto mantenimiento y revisión periódica después de la instalación puede derivar en problemas de sellado, funcionamiento o deterioro prematuro. Es importante inspeccionar y mantener las ventanas para garantizar su rendimiento a largo plazo.