Cuando diseñamos o renovamos un espacio, cada elección importa, y las ventanas no son la excepción. Más allá de su función estética, el tipo de apertura que elijas impactará directamente en el confort, la eficiencia energética y acústica y la funcionalidad del lugar. Entre las opciones más populares destacan las ventanas practicables y correderas. ¿Qué diferencias existen entre ellas? ¿Cuál conviene más según cada necesidad? Hoy te ayudamos a resolverlo.

Ventanas practicables: eficiencia, ventilación y seguridad
Las ventanas practicables son un clásico de la arquitectura. Se abren hacia el interior o el exterior mediante bisagras, similar al funcionamiento de una puerta. Esta apertura permite un cierre hermético que ofrece importantes ventajas:
- Mayor eficiencia térmica y acústica: su sellado multipunto reduce pérdidas de energía y mejora el aislamiento contra el ruido exterior.
- Excelente ventilación: pueden abrirse totalmente, permitiendo un flujo de aire más controlado y efectivo.
- Alta seguridad: gracias a sus mecanismos de cierre robustos, las ventanas practicables incrementan la protección del hogar.
- Vistas despejadas: al abrirse completamente, no presentan obstáculos visuales como marcos intermedios.
Sin embargo, es importante considerar que requieren espacio para su apertura, lo que puede ser un desafío en ambientes reducidos, y que su limpieza exterior puede complicarse en ventanas de gran tamaño.

Sistemas Kömmerling recomendados para apertura practicable:
- EuroFine 58
- KÖMMERLING76 AD Xtrem
Ventanas correderas: optimización de espacios y diseño funcional
Las ventanas correderas, también conocidas como deslizantes, se abren desplazando los paneles horizontalmente sobre un riel. Su diseño es ideal para proyectos donde el espacio es limitado o donde se busca potenciar las vistas al exterior:
- Ahorro de espacio: perfectas para balcones, patios o interiores donde cada centímetro cuenta.
- Operación sencilla: se abren con un leve movimiento, facilitando su uso incluso en formatos grandes.
- Amplias vistas panorámicas: su diseño minimalista reduce obstrucciones visuales.
Eso sí, presentan un sellado menos hermético que las abatibles, lo que puede impactar en el aislamiento térmico y acústico, y su ventilación es menor ya que tiene limitación al abrirse.
Sistemas Kömmerling recomendados para apertura corredera:
- PremiLine 58
- PremiLine 80
- PremiSlide76
- PremiDoor76 (ideal para puertas corredizas de gran formato)
¿Qué opción elegir?
La respuesta dependerá de las prioridades de tu proyecto:
- Si buscas máxima eficiencia energética y acústica, ventilación y seguridad, las ventanas practicables son la mejor opción.
- Si prefieres optimizar espacio, disfrutar de grandes vistas y tener un sistema fácil de operar, las ventanas correderas son ideales.
Ambas alternativas, al estar fabricadas con los sistemas de alta calidad de Kömmerling, garantizan durabilidad, diseño de vanguardia y un compromiso firme con la eficiencia energética y la sustentabilidad.
Invertir en el sistema adecuado es apostar por el confort, el ahorro y el valor a largo plazo de tus espacios.